Ollanta y el salario mínimo: deshojando margaritas

Mientras que en Perú el presidente Humala anuncia que se está evaluando un aumento del salario mínimo, el mismo que se daría en los últimos cinco meses de su gobierno, cuando son varios los candidatos que ofrecen aplicar esa medida, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) encuentra en un informe reciente –para el caso de México–que los aumentos del salario mínimo durante el periodo 2005-2014 no tuvieron impactos negativos en los niveles de empleo, por lo que hay margen para incrementar el salario base de manera progresiva.

En efecto: según informa el diario El Financiero (México), el informe “Salario Mínimos y Empleo” de la OIT, presentado ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), señala que la productividad laboral creció en la última década más de 15 por ciento, mientras que el salario mínimo tuvo una disminución en igual proporción, dando cuenta de una gran desconexión entre la rentabilidad empresarial y la retribución salarial de los trabajadores.

En TrabajoDigno.pe hemos señalado en anteriores ocasiones que los incrementos de la remuneración mínima, realizados sobre la base de criterios técnicos y en contextos de crecimiento económico, no generan efectos negativos en el mercado de trabajo, tales como la reducción de los trabajadores cubiertos por la RM o el incremento de la informalidad laboral (Rompiendo mitos).